(Blog de Pablo Natale)

No soy yo, es otro. Pacman, no pacman. Todas las mañanas abro los ojos, me empiezo a dar con pastillas, se hace de noche. Oscuro, neto y oscuro, de noche. Entonces qué. Entonces qué. Dicen que si me suicidio me parezco, dicen que por eso, que por eso. No entiendo. Mi boca no sirve para hablar, en ese estado mi boca no sirve para hablar. Mastico. Mastico, mastico, mastico. Mastico y muerdo. Muerdo y eyaculo y orgasmo. No soy puto me hice puto me hicieron el puto. Mujer hombre cara o culo. Soy no soy o sí o. Claro. Pues claro. Hablaría de Mao pero no sé de Mao. Hablaría de tetas pero no sé de tetas. Sé de comer. Sé hablar sé comer. Como, entonces soy. No, nade de deficiencias, nada de supuestos cardiovasculares. Nada de grasa, gordita, nada de ciencia. Ninguna otra ciencia. Black momba, baby. I´m a block momba. I wish I was. Sutiles y sucesivas ediciones hicieron de mí algo más, algo superior a lo que era. Me hicieron otro, y me dejaron solo, distinto, transfigurado. Roto. Qué. Qué de qué. Tan viejo como el chavo, tan viejo como don ramón. Los pitufos, nací con los pitufos. Después terminó la guerra fría, terminó la guerra fría, ahora, por internet, puedo averiguar como hacer bombas. Soy Pacman, era Pacman. Viejo minotauro amarillo, en mi viejo laberinto negro. Viejo minotauro amarillo, en mi viejo laberinto negro. Todo boca, pacman: canto de chips, baile de chips. MB, Kb, subir y bajar. Pacman. Aura sacrificial. Pacman. Barcos vienen, barcos vienen. Victimas o victimarios. Pacman. Yo no como. Soy. Ahora digo: yo no como, soy. Eso, eso, eso.