"Uno camina por una avenida enorme llena de plátanos. Y uno se dice: ¿cómo puedo hacer para cortar todos los plátanos con mis propias manos, sin que nadie lo vea, y en una sola tarde?"

"Lo deliberado nunca acierta: ese podría ser el proverbio de un ángel. A lo que uno respondería: no te detengas, vengas del lugar donde vengas"